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.:: Pioggia ::.

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L: Yo no soy nada, salvo piel y sangre, y un día mi corazón dejará de latir y nada de mí quedará. Los recuerdos también desaparecen.
S: No sólo de ti nada quedará: nada quedará, simplemente. ¿Nunca lo has pensado? Precisamente, la verdad depende del ojo que mira. Si para mí eres la verdad, ¿qué me queda si no estás?
L: Iba a decir que soy una chica triste, pero mentiría de nuevo, porque yo soy la misma Tristeza.
S: Si eres el ideal por el cual aspirar a la perfección tiene sentido.
L: ¿Cómo puedes tenerme en tan alta consideración?
S: Si tú eres triste, la misión de todo caballero es hacerte feliz.
L: No creo que quede en el mundo felicidad para alguien como yo.
S: Porque no hay injusticia mayor en el planeta si el rostro más digno guarda tristeza.
L: No soy tan buena persona como crees. Sólo soy humana y como tal cometo errores.
S: ¿Tan decepcionada de la vida? Bueno, yo estaba en un momento parecido, pero he aprendido que aunque se pierda la esperanza, hay cosas que jamás se le pueden quitar a un ser humano.
L: ¿Y cuando a un ángel se le quitan sus alas? Podrá quedar su alma, su sonrisa, su gracia... pero ya no podra volar.
S: Si no cometieras errores no serias humana por supuesto. ¿Y qué virtud más grande que errar para nuestras vidas? ¿De qué otro modo aprender o avanzar?
L: No quiero avanzar porque no tengo fe en que me aguarde nada bueno.
S: ¿Y si las alas del ángel le pertenecen a su espiritu? Antes tendrían que arrancarle el corazón al ángel, la divinidad, que ya no es cosa suya, ya uno tendría que tratar con las fuerzas mas poderosas e incomprensibles del universo. Quizás el ángel es alas.
L: No creo en Dios.
S: Tampoco yo. ¿Y? Pero creo que hay cosas que no entendemos y que existen. Así como los atomos no nos entienden y nosotros no somos la última estructura de la materia, nosotros no entendemos lo que formamos.
L: Cuando vayas a Alemania encontrarás seguro a alguien mejor que yo. ¿Qué quieres estudiar?
S: ¿Y si te digo que sé que no encontraré a alguien mejor que tú? No superficilalmente dicho: Lo sé como conozco el destino (quiero estudiar Física).
L: ¿Conoces el destino?
S: Sí, creo que el destino se me revela en ocasiones. Más que nada me lo dice en sueños que quedan inconcientemente en mi sentir. Por eso, esto lo se emocionalmente.

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